LA GASTRONOMÍA DE LOS FANTASMAS

Una niña de Primer año de Secundaria me dijo con su carita seria y preocupada: ”Profe, en el coliseo, penan”. Entre  serio y sonriente le pregunté “¿Quién te ha dicho?”. Ella contestó molesta porque yo tenía una de no te creo “Sí profe, en el coliseo penan”. Ya iba a empezar la oración de adviento, y como estaba en formación, no le inquirí más y me desplacé y recibía los saludos de mis tutoriados. A medida que caminaba y saludaba a los pequeños, vino a mi mente una mezcla de canción y poema que empecé a tararearla:

 “Ay pena/ penita pena/ pena de los grandes / pena de los chicos/ pena de muchos amores/ por Dios/ pena…pena”.

Observaba a mí alrededor y empecé a ver fantasmas y calaveras en el mejor sentido de la palabra. Mis ojos se posaron en una de las viviendas de estos seres que ahora funcionaba como comedor. Cuando ibas a comer en grupo, no te molestaban. Al contrario, sentías una paz navideña y una calma chicha. El ambiente se presentaba para el chisme y el “raje”, entre las verduras y el limón, amén de los tallarines de todos los colores y el arroz blanco que acompañaba el cau cau, un lomito saltado, un ají de gallina apetitoso y carne, abundante carne.

Sin duda, era un lugar propicio para calmar la sed y comerse un bocadillo salado o dulce para que sirva de postre a los atribulados fantasmas. Ellos y ellas son tan cuidadosos que nunca son descubiertos. Lo bueno es que son criollos porque les gusta el ají, y cuando pica, da sed, y el que se pica, pierde.

Un pequeño sorbo de agua, emoliente, inca cola o jugo no te hace ni rico, ni pobre. Además, hace calor y la pasión de estas almitas son la torta de chocolate y tres leches.

Estaba tan rica la torta que dieron rienda suelta a su apetito voraz. Y es gente educada porque dejaron una porción de chocolate para que no se reviente la hiel.

Años atrás se les dio por la cultura porque habitaban la Sala de Profesores  y al buen estilo de Arthur Rimbaud, se llevaban los libros y revistas, pero no los regresaban.

Tenemos que reconocer la intelectualidad de los fantasmitas que eran intelectuales de primera línea, porque además de la literatura, les gustaba el cine, así que se llevaban los discos y también las revistas y periódicos. Es por eso que debemos leer y leer para evitar que los fantasmas que son tan cariñosos y juguetones se salgan con la suya.

                                                                                  Don Lucas

Antipasto navideño

 Empezamos los exámenes finales: Maestros y alumnos listos para la jornada de diciembre. Las casas de Lima y sus distritos exhiben sus árboles y adornos navideños. Luces de todos los colores engalanan las calles. Los Padres de Familia visitan las tiendas para ver qué van a comprar. Varias de nuestras aulas tienen adornos navideños. Una de ellas es la sección de Primero “D”. Las niñas y los niños se han esmerado para que su sección quede bonita. Es más, Antonella ha traído dos muñecos patilargos para que saluden a sus invitados con una Feliz Navidad.

Los chicos y chicas estudian sus cursos, terminan de presentar sus tareas y  hacen intercambios de regalos. Nosotros recordamos la función de teatro donde  participaron alumnas y alumnos de Secundaria. Entre ellos Brisolesse, Wendolin, María Jimena, Zúñiga y muchos más.

También recordamos Musiclaret dirigidos por Ángel Urdániga, donde participaron muchos estudiantes desde Primaria hasta Secundaria. También participaron ex alumnos, profesores y los Golden Jeans.

La clausura de Los Juegos Florales Claretianos se hizo más grande y participaron alumnos y alumnas, Profesores y Padres de Familia. Entre los profesores y profesoras tuvimos a Wilson, Eddy, Gladys, Emilio, Renée, Leidy, Sofía, Rosita, Domi, Sonia, Dora y otras profesoras.

Infancia Misionera cerró su participación con una actuación en el Coliseo donde contamos con la presencia de profesoras de Inicial, Primaria y los profesores de Secundaria. Ellos y ellas cantaron con las niñas y niños. Después de varios días se dieron presentes a los integrantes de Infancia. Tenemos que agradecer a Carol, Janet y Liliana quienes estuvieron siempre presentes para apoyarnos. Asimismo, agradecemos a todas las personas de nuestro colegio que hacen posible la existencia de Infancia Misionera. ¡Feliz Navidad Carito!

Tuvimos la Auditoría Externa. Las profesoras, profesores y nuestras autoridades claretianas, estuvimos preparados para esta realización. Pasamos la Auditoría externa. Emilio nos dio la información grata en el Correo. Después vinieron los comentarios a los profesores y ya en la tercera,  fuimos convocados por la Dirección del Colegio para contarnos  esta aprobación y que hay que recorrer el camino con esfuerzo para volvernos a encontrar en el año siguiente.

Un agradecimiento especial y un abrazo  para Katherine por apoyarnos constantemente.

Continuamos con los exámenes y les deseamos a todos

¡FELIZ NAVIDAD Y PRÓSPERO AÑO NUEVO!

Eddyelpoeta.blogspot.com

EL PUEBLO DE LOS SUEÑOS

Había llegado temprano al colegio. No dormí bien y estaba somnoliento, entre dormido y despierto. Avancé a la zona donde se marca la entrada y cuando miré a los pinos enanos del jardín, noté que no eran tan pequeños. Yo me sentí Gulliver ante las casitas que estaban en todo el jardín. Las había de todos los colores,  con sus techos hermosos. Miré a los alrededores y no había nadie. Fue entonces, que cerré los ojos para poder entrar en ese maravilloso mundo. Era un ciudadano de aquel pueblito encantador. Era un liliputiense más, así que recorrí con mis ojos bien abiertos por las calles de ese emblemático lugar que en mi cabeza parecía sonar como  Cuore o tal vez Heart,  Sonko,  Coeur,  Cordis o Kardios. En fin, un maravilloso pueblo con sus chimeneas, ventanas, balcones, escaleras blancas para subir al cielo. En las ventanas, estaban los adornos navideños de colores rojo y verde con la presencia del gordo y bonachón personaje que nosotros llamamos de tantas formas, ya sea Papá Noel, Santa Klaus o el viejito Pascual. También veía el blanco de la nieve que caía sobre los pinos verdes. Sentía un  poco de frío y observaba a los ciervos que se desplazaban con libertad. El mundo europeo y el serrano se daban la mano, porque vi llamitas, gallos, carneritos que habían amanecido y estaban por la calle mientras los habitantes de este pueblecito dormían porque habían celebrado la nochebuena. Qué bien para mí porque yo, a pesar de ser un intruso, me sentía parte de él ya que alguna vez, cuando niño, habité en un mundo igual y viví maravillosos momentos que esta vez se estaban repitiendo y no me lo iba a perder por nada del mundo.

A medida que recorría este pueblo de amor y ensueño, vi  a pocos metros, las líneas del tren como había en mi pueblo y donde los niños de aquel entonces solíamos trepar y subir a los techos de los vagones para  saltar de un vagón a otro, mientras nos perseguía el encargado de la estación. Siempre fueron mi mejor juguete, los trenes. Cuando venía la Navidad, a mí me regalaban pistolas y sombreros, pero a mi hermanito menor, le obsequiaban trenes. Cada vez que él no estaba en el cuarto de los regalos, yo sacaba sus trenes y me ponía a jugar. Hasta hoy me gustan los trenes. Son mi pasión. ¿Por qué no tomar uno de ellos para que me lleve a Sallent, la tierra del Padre Claret? Ahora o nunca. Pues me voy a subir, aprovechando que no está el hombre de los trenes y me voy a sentar cómodo en uno de los asientos del vagón y ¡Buen viaje! A tierras españolas. Con mi chocolate y el panetón, disfrutando entre las casitas y la iglesia de una fiesta navideña que me ofreció la imaginación y que duró hasta que Anita Gómez-Sánchez me preguntó si había perdido algo. Nuevamente en las cercas del jardín, anonadado y feliz observaba el pueblito de los sueños que me permitió viajar a través del tiempo y el espacio.

 Tengo que agradecer al Profesor Jallo y sus alumnitos y alumnitas que han hecho posible que yo vuelva a recordar mi infancia como todas aquellas personas que observan al Pueblo de los Sueños.

                                                                       Eddy Gamarra

LLEVO EN MI MEMORIA LOS LUGARES. . .

 

…DONDE FUIMOS JUNTOS A BEBER/SOÑANDO NOS PASÁBAMOS EL TIEMPO/QUÉ GRANDE COSAS ÍBAMOS A HACER…

Es una canción que recuerdo siempre y que me permite acercarme a mi pasado de estudiante en la Universidad. Los libros, los amigos, el Arte, las fiestas, los proyectos futuros y el tiempo inexorable que nos mira desde diferentes ópticas. Una de ellas es la música. Quién lo creyera que mi primera opción de  estudio, fuera la música. Quería ser pianista; mis padres, no querían. No me compraron el piano y me contenté, de alguna manera con el Arte dramático, en la ciudad de Trujillo. Sin embargo escuchaba música clásica en la casa de Arnaldo Fernández. Todavía recuerdo su biblioteca donde nos amanecíamos hablando de Literatura, arte, el significado de las palabras y la música de los grandes maestros. La biblioteca de Arnaldo era la más grande entre todas las bibliotecas  de mis amigos lectores, en Trujillo. En ella estaban sus libros y muchos libros de su padre que también tenía una buena biblioteca  en su casa. Su padre que además de abogado era maestro universitario y le fascinaba los libros como a su hijo. Otra parte de los libros de mi amigo Arnaldo, eran de su tío, el escritor José Eulogio Garrido, integrante de la Bohemia de Trujillo que estuvo formada por César Vallejo, Antenor Orrego, Alcides Espelucín, Federico Esquerre y tantos otros poetas y escritores. Su tío había fallecido y su enorme y valiosa biblioteca estaba  le ofreció la oportunidad de llevar algunos libros para que Arnaldo y yo pudiéramos disfrutar de sus páginas. Yo no tenía biblioteca. Apenas, unos cien libros. Mi familia no era lectora. Solo mi madre y yo leíamos en casa. Es por eso que cuando visitaba a Arnaldo, después de una larga plática, regresaba a casa llevando diez a doce libros para leerlos  y después, comentarlos en su biblioteca.

Tengo que reconocer que gracias a Arnaldo empecé a comprar mis libros y a leer más. Es una especie de adicción que me hace sentir  feliz y que en muchos casos me ha obligado a abandonar mis estudios  musicales y otros estudios. Es cierto que aprendí quena con el maestro Alejandro Vivanco y que me dio la oportunidad de enseñar alguna vez y donde tuve un gran discípulo y un gran amigo: Jorge Tovar Serpa. Él me enseñó a amar los rincones  alejados del país a través de la música y ambos tocábamos la quena a dos voces, ya sea en las actuaciones del colegio, en la casa de los amigos y en fiestas ya sea en los pueblitos de Huancayo o en Cusco y también, en Lima. Alguna vez formé parte de grupos folklóricos donde tocaba la quena, o el bombo, o mohoceño, además de las tarkas, pinkullo y otros instrumentos musicales.

Aprendí algo de charango con un gran maestro: Juan Condorena y tuve la suerte de tocar cuando inauguraban el coliseo claretiano. Es por eso que cuando escuché a mi alumno Murrieta, de tercer año de Secundaria, tocar el charanguito en la canción TINKU, me emocioné y me olvidé por un momento ser uno de los maestros de Ceremonia, y me convertí en un oyente que estaba disfrutando de esta interpretación de los alumnos de Angelito Urdániga.

Tal vez algunos no lo sepan, pero mis primeras lecciones de saxofón, las recibí de otro maestro, que yo estimo bastante: Manuel León. En aquel entonces, era el Director de Banda de un colegio nacional. Allí estaba el instrumento y me enseñaba al igual que los alumnos del colegio nacional. No era mi colegio. Era el suyo como profesor y los sábados en la tarde, yo estaba como uno  más de sus alumnos.

Podrán darse cuenta mis queridos  lectores, que detrás de muchos alumnos están grandes maestros. Los maestros tienen que ser reconocidos en todo momento. Es por eso que lo hago cuantas veces pueda. He tenido muchos maestros desde mi profesor de primeras letras que me dio las primeras lecciones de idiomas, De igual manera, mis profesores en el colegio, en las universidades donde estudié, los Institutos donde aprendí  algo de Inglés, quechua, francés, italiano, griego y latín. Sé que no lo practico y me olvido de ellos. De ahí, mi mala costumbre de emplear con mis alumnos y alumnas de Primero y Tercero expresiones en diferentes idiomas.

Me alegra mucho que Oswal Canales sea un músico de jazz de primera línea. Siempre con su perfil bajo y una idiosincrasia muy noble y sencilla. Yo no le enseñé nada de música. Solo fui su profesor de Inglés o Comunicación,  alguna vez y me siento orgulloso de haber tenido alumnos de la talla de Oswal, Juan Carlos Pajuelo  Juan José Chuquisengo Orihuela  y muchos más.

Cuando un pueblo canta, está feliz y cuando tocan y cantan Los Golden Jeans, es una alegría especial: En aquel conjunto tenemos a tres profesores claretianos que a través de la primera guitarra, los teclados y la batería demuestran su amor a la música y a la vida. Ellos son Wilson, Ángel y Lucho Rojas. Son los músicos que quedan, además de los citados, el Padre Stalin y Hernán Pinto.

Al final de la jornada, Don Quijote ya no quiere “desfacer entuertos”, recupera “su razón” y se vuelve materialista; en cambio, Sancho le dice a Don Quijote que extrañaba las salidas y los combates. Aquella famosa sanchificación de Don Quijote y quijotización de Sancho me hace recordar que alguna vez cantábamos y ahora ya no lo hacemos. Los profesores jóvenes no conocen esa palabra mágica que se llama Música y los demás, la han retirado de su diccionario. Nunca es tarde para escuchar aún la música que algunos filósofos y los astronautas  disfrutaron en su momento dado.

Para terminar estos recuerdos, agradezco a mi primer profesor de violín, el Maestro Valdivia quien me enseñó  amar este instrumento y a escuchar a grandes violinistas hombres y mujeres a través de youtube. Todo esto y mucho más forma parte de mis recuerdos sobre estudio, literatura y música y que a pesar del poco tiempo que dispongo, los tengo presente y juego con el tiempo inexorable y burlón para sacarle algunos minutos para aprender a tocar el violín, para  leer y también para escribircomo el título de la canción; Aquellos fueron los días (Thosewerethedays).

                                                                       Eddy Gamarra

MUSICLARET EN SUS QUINCE AÑOS

Han transcurrido tantos años en que me desempeñaba como maestro de ceremonias en este espectáculo y que tenía como coanimadora a diferentes compañeras entre ellas a Olga, Motta, Tula y en estos años a Gladys. Espero no olvidarme de ninguna. Si fuera una quinceañera, le tocaría bailar con Angelito Urdániga, que es su padre y realizador. Todos los demás estaríamos en la ronda, para bailar con la quinceañera que tantos artistas, ha brindado a nuestro colegio.

Qué bien tener a los exalumnos que alguna vez subieron al escenario para brindar a sus padres, hermanos, amigos y amigas,  a sus compañeros y maestros,  esta parte del corazón claretiano que nosotros llamamos Musiclaret.

Es una experiencia maravillosa estar en el escenario, entre las luces, los micros, instrumentos y una serie de cordones que se entrecruzan. Frente a nosotros, está el público con sus cámaras listas para disparar sus flashes contra los artistas de Musiclaret.

Cómo no recordar a Jorge Tovar con la quena, yo, con la flauta traversa, el charango o el saxofón. Allí veo a nuestras cantantes como Meche, Marisol, Olga, Tula y tantas más. En cuanto a los músicos, además de Angelito en los teclados, tenemos a Wilson, Lucho Rojas y otros maestros de antaño como Hugo Díaz en la armónica y al “Puma”. No podemos olvidar a nuestro amigo Alvita con su magnífica voz y la guitarra. En estos años más cercanos, el compositor y músico Manuel León que también nos acompañó como ahora lo hacen José Navarro y Oswald Canales.

Es una emoción muy grande para nosotros estar y participar en este espectáculo donde participan nuestros alumnos y alumnas. Tenemos que reconocer a las chicas y chicos de Tercer año de Secundaria que vinieron al espectáculo para aplaudir a sus compañeros y compañeras, quienes ganaron el concurso de rock con una canción de un grupo holandés. El título de la canción es  Venus y nuestros músicos: Carol, Paolita, Mauricio, Palacios, Cruz, Jesús Yaya. La interpretación gustó al público y a nosotros también. Entre los chicos de la barra estaban César García, el director de la barra, Priscila, Camyla, Claudia Garavito, Natalia, Briceño, Andrea y muchos más. Es necesario mencionar a otras artistas de Tercer año como Andrea Blua, María Gracia, Gina Figueroa. Entre los artistas: Murrieta que nos deleitó con la interpretación del charango en TINKU. Allí estaba Marcelo Sánchez en la batería con los Street five.. Ellos fueron premiados por el colegio. Yo estaba tan emocionado que me estaba olvidando entregarle el diploma a Carol Zacarías.

El programa fue variado. Había Rock, Latin pop, Música criolla, Blues, Folklore, Beat box, Canto y coro. El taller de Banda interpretó Libertango,  de Astor Piazolla. Fue una magnífica interpretación que nos gustó mucho.

El taller de Canto y Coro, interpretó Mamma mía. Esta canción se hizo famosa con el Grupo Abba. Esta vez la interpretó nuestro coro integrado por alumnas de primaria y Secundaria. Los papás, emocionados, filmaban, fotografiaban a sus engreídas. Un poco más y se suben al escenario como los primeros fans de sus hijas.

Se hizo un reconocimiento a los alumnos de Quinto año de Secundaria que estuvieron cinco años consecutivos en Musiclaret. Desde este blog, me permito decirles a los chicos MUCHAS GRACIAS. Regresen pronto a MusiClaret que siempre los esperará con los brazos abiertos. Estos alumnos son los siguientes:

·         Kimberly Ojeda

·         Carlos Ballesteros                                                    

·         Franco Tejero

·         Cristian Chauca

·         Cristian Arias

·         Julio Huamán

·         Julio Zevallos

·         Emanuel Vidal y Adrián Vásquez, que nos acompañó un año.

Una vez más un gran reconocimiento a los Claretianos que participaron durante años a Musiclaret.

Agradecemos la presencia de nuestro Director, el R. P. Ronel Chipana. De igual manera, agradecemos a nuestros Subdirectores y Coordinadores quienes siempre nos están apoyando en estas realizaciones que tienen el carisma del Padre Claret. Seríamos injustos callar y no mencionar a todos nuestros compañeros y compañeras que estuvieron en diferentes Comisiones hasta el final del Programa.

Si tuviera que describir todo el programa, sería muchas páginas y tengo que felicitar de manera especial a la poetisa claretiana Gladys Villanueva quien una vez más estuvo presente coanimando esta parte del corazón claretiano que nosotros llamamos Musiclaret.

Un abrazo fraterno para Angelito Urdániga por este maravilloso espectáculo que él preparó y dirigió con esfuerzo, pundonor y espíritu Claretiano.

                                                                                                              Eddy Gamarra

LA TORTA DE CUMPLEAÑOS

El sábado diez de noviembre fue un día muy especial para nuestro amigo Chacho, igualmente para Janet y también para mí. Los alumnos y alumnas de Tercer año de Secundaria me felicitaron el día lunes. Recibí hermosos regalos y  también, una carta maravillosa,  de uno de ellos. Uno de los bellos regalos fue una torta de chocolate que Marianita y un grupo de Chicas de la Promoción 74 me obsequiaron. Se veía tan deliciosa que se deslizaron un grupo de propuestas, entre ellas la de Alejandra que era de la idea que yo me llevara la torta a mi casa; Marcia, Andreíta y Janis, se les hacía agua la boca y tenían su plato listo para degustarla. Otras, esperaban que yo decidiera y así, la lectora de literatura gótica, tomó el cuchillo –por si acaso- no es un pasaje de Vajda, sino para cortar la torta de chocolate. Ella distribuyó equitativamente una pequeña porción para cada una de las chicas y cortó una tremenda porción para el cumplimentado, es decir, yo. Como el tiempo de recreo era corto, decidí llevarme mi parte y el resto de la torta, para mi casa. Me ayudaron, Martina, Carmen, Marie, Verónika, Viveka y Emilia. Nos dirigimos al comedor de los profesores y después de abrir la puerta, guardé el exquisito presente en la refrigeradora. Como aquella tarde, tenía urgencia de realizar varios trámites en un banco y en otros lugares. Dejé la torta en su caja para recogerla el día martes. Recordé aquella expresión de antaño “El martes, ni te cases ni te embarques, ni de tu casa te apartes”. Me aparté del distrito de San Miguel y me fui para San Isidro. Dos distritos cuyos nombres son santos. Así que estaba protegido. A pesar del taxi que me cobró una fortuna para llevarme a esos lugares, logré realizar mis trámites. No me crucé con ningún gato negro y decidí regresar a casa para contarles sobre mis regalitos.

Caminaba por Las Begonias para llegar a Javier Prado y tomar mi colectivo, y vi a un centenar de chicas-muchas de ellas con los ojos rasgados- quienes esperaban a sus ídolos en especial, al coreano del baile del caballo. No me dejaban pasar. Gritaban y gritaban para que asomen “los chinitos”, pero el único que asomó fue un moreno que estaba con una escoba como si fuera San Martín de Porres. Me hice la señal de la cruz y le pedí a San Martincito que hiciera un pequeño milagrito, para que me dejen pasar. Parece que se cumplió lo que pedí, porque me vino la idea de gritar como los demás, hacer un pasito del caballo, como me enseñó mi amigo Chicho, y la gente aplaudió y dijo “que el tío estaba a la moda”.

Gracias Martín-dije para mis adentros- y continué con mi camino para intentar cruzar la Avenida Javier Prado. Me crucé con muchas chiquillas de cabello largo y negro. Todas se parecían. Me acordé de Emi, una de las escritoras de Tercer año. Ella siempre me llama sensei. Ahora, este sensei, tenía que tomar con prisa un colectivo para La Marina. Así fue y logré llegar a casa. Les conté sobre la torta y me dijeron por qué no la había traído. Yo me imaginaba con este riquísimo  regalo que se me caía entre las innumerables fanáticas del baile del caballo y terminar embarrados todos con chocolate.

Ya había llegado la noche y me puse a leer una novela llamada Blanco y negro y como estaba cansado, me acosté temprano para esperar el próximo día y poder traer la torta de cumpleaños que estaba solita en la refrigeradora del comedor de trabajadores. Cuando llegó el día siguiente, ingresé en el primer recreo y vi la caja dentro de la refrigeradora. En el segundo recreo, volví a ingresar y encontré a una bella profesora de Primaria en el comedor. No me atreví a revisar la torta. La última vez que ingresé, para llevarme la torta a la hora de salida, encontré la tapa que estaba abierta. Al abrirla, me di con la sorpresa que se habían comido gran parte de la torta de cumpleaños y me dejaron algo para comerla en mi casa. Ni siquiera, me dijeron gracias. Por lo menos la torta de tres leches que se comieron en otra oportunidad, lavaron el táper y si se trata de las gaseosas, tapan las botellas.

 En caso del ají, limones, sal, no sé. Tengo que imaginar  que hay un fantasma que está pasando hambre y que es menester alimentarlo.”Después del trueno, el relámpago” dice el autor de El lazarillo de Tormes. El hambre es terrible y yo no quiero ser el ciego ni el fraile de esta novela picaresca. Así que he decidido dejarle a este pobrecillo famélico o famélica unos sanguchitos de pollo con bastante mayonesa preparada a las doce de la noche y con la ayuda de tres padrenuestros y una ave María para purificar el alma  de este fantasmita. Leidy ha prometido un refresco con unas hierbitas de ruibarbo para limpiar su barriguita, en caso le caiga mal.

Como no podemos recurrir a una norma sobre la seguridad en el trabajo, el Doctor Larios ha prometido una pastillita milagrosa que ha dado buenos resultados y que no quiere dar el nombre para que los incrédulos, se burlen. El equipo de Comunicación ha culpado al Chavo del ocho o a Lázaro de Tormes. Yo pienso que fue el buscón llamado Don Pablos, exemplo de vagamundos y espejo de tacaños. La ficción se ha puesto de acuerdo y para investigar ha contratado al Doctor Watson y su gran amigo Sherlock Holmes. El Equipo de calidad va a solicitar una cámara especial para el comedor y para el próximo 31 de octubre, los trabajadores traerán sus calabazas con una velita cada uno para limpiar el lugar. Esta reunión contará con la presencia del más alto dirigente del Equipo de la Convivencia: El Dr. Nolberto Mejía.

Don Lucas

CLAUSURA DE LOS JUEGOS FLORALES

 “Lindverght Tello Mejía”

   Llegué a casa y me quedé dormido cerca a Charlotte (así se llama mi perrita). Soñaba que me iba a la playa para buscar el camino que me lleve a la casa del sol naciente. De pronto, un ladrido me despertó. Sentía como que mi mascota me decía: “Levántate que ya es hora de ir a la Clausura de tu colegio”. Me levanté y después de un baño reparador, tomé el taxi y me dirigí al colegio. Ya estaba frente a la puerta de entrada de Inicial, y toqué, toqué y al fin me abrió la puerta Carlos. Pregunté si había llegado alguien y me dijo que no. Como soy tan escéptico, avancé hacia el coliseo y allí estaban el fotógrafo, el responsable del coliseo y la música y alguien más. Veía la batería, los cables, las sillas blancas dispuestas en orden y una enorme gigantografía de nuestro ilustre amigo, el profesor Linverght Tello Mejía. También figuraba sus datos biográficos y una exégesis de su labor en el magisterio. Tengo que ser honesto y manifestar que siempre me obsequiaba las antologías de los autores peruanos en diversos tomos. De ahí aprendí a obsequiar libros a los amigos aunque no todos tengan la costumbre de retribuirte con un libro de su especialidad.

Después de observar los detalles vi a una valquiria sentada en las gradas del coliseo. Me contó que no sabía por donde entrar a las puertas del cielo. No sé si era el Valhala, pero todos los caminos conducen a Roma y si es al Coliseo del Padre Claret, mejor. Tenía el violín entre manos y la melodía del amor es triste por mis sesentaicuatro costados.

Después vino Angelito. Menos mal que él vive cerca al colegio donde todo el año es verano. Allí estaba Wilson también con su flamante guitarra eléctrica. Lucho Rojas se hizo presente después con las palabras que iba a decir antes de la Premiación. Estaba un poco nervioso que se confundió de papel, porque eran las deudas que tenía que cancelar a sus acreedores.

Subimos al escenario y realizamos un conato de ensayo que fue visto  y oído por algunos Padres de Familia que ya estaban sentados antes de la hora. De pronto empezaron a llegar las chicas. Estaban todas regias con su uniforme. Eran las profesoras del Equipo de Comunicación tanto de Primaria como de Secundaria. Estaban las Marimbas de la Fe, desde “nuestra jefecita” de Infancia Misionera, Carol hasta Janet, que va a cumplir años el mismo día que yo.

En Secundaria Angélica, Alexandra y Raquel listas en sus puestos, daban la hora para el inicio del del Programa. Angie, me dijo que ya era hora de empezar-dije para mis adentros- tus deseos son órdenes. Sin embargo observé que los alumnos y alumnas de Secundaria que iban a recibir premios, estaban casi todos con sus Padres, pero y mis engreídos de Primer año y Tercer año de Secundaria, ¿Dónde están? …Apenas estaban tres, entre ellos Diego Rodríguez. En menos de lo que canta un gallo- sin alusiones personales- la Sala se llenó. A colocar más sillas porque seguían llegando los Padres de Familia y alumnos. Desde lejos observé un ecran desde donde proyectaron imágenes de los concursos ya sea de Cuentacuentos, declamación, ortografía, mitología y otros.

Entre las profesoras estaban Carole, Olga, nuestra Maestra de Ceremonias: Gladys Villanueva-siempre tan humilde- y dos alumnos. De los cuales reconocí a Luyo y ¿una niña de Primaria?, ambos con buena dicción y presencia escénica que dieron inicio a nuestra Ceremonia de Premiación en la Clausura de los Juegos Florales “Linverght Tello Mejía”.

Desfilaron desde los niños y niñas más pequeñitos hasta los más grandes. Algunos de ellos y ellas se lucieron declamando bellos poemas que fueron aplaudidos por los Padres de Familia y profesores.

Entre las autoridades del Colegio estaban el Padre Director, el Profesor Novoa y la Profesora Tula Valdivia, Subdirectora de Primaria. Emilio Acuña, Coordinador de Comunicación y Arte se desplazaba por diferentes lugares para que todo salga como se había planificado. Las profesoras tenían lista la relación de ganadores y sus diplomas respectivos. Las fotos de los Padres y los profesores iban y venían a diestra y siniestra.

Tuvimos la acertada participación del artista Pepe Cabana que divirtió a los niños y a los adultos con su Teatro de Papel. Le estamos muy agradecidos por aceptar la invitación y esperamos que no sea la primera vez que lo tengamos por aquí.

Después llamaron a los profesores quienes interpretaron Love is blue de Paul Mariat, a solicitud de Wilson Olaya. En el teclado, Ángel Urdániga; en la guitarra eléctrica, Wilson; en la batería, Lucho Rojas y Eddy Gamarra, en el violín. Es un honor haber tocado con la mayoría de los integrantes de los Golden Jeans.

Tuvimos entre los invitados a la señora Carmela, viuda de Tello, esposa de nuestro amigo y profesor en la Universidad  Villarreal de Jorge Díaz, Emilio Acuña y Wilson Olaya. Las palabras de la Señora Carmela fueron muy emotivas y el Equipo de Comunicación agradece su presencia en esta gran realización que nosotros conocemos como La Ceremonia de Clausura de los Juegos Florales Claretianos “Linderght Tello Mejía”.

Al final, el Padre Ronel, Director de nuestro Colegio, dio por clausurada esta ceremonia

                                                        Eddy Gamarra Tirado                    



RECORDAR…

No tengo costumbre de ver tanta televisión, sin embargo, una noche, mientras pasaba de un canal a otro, entrevistaban a un sacerdote de apellido Oviedo. Él comentaba a la periodista que recordar viene del latín “Re”: volver a, y “Cordis”: corazón. Volver al corazón. Recordar lo bueno, lo bello que ha pasado en la vida. Se lo dije a mis alumnos y alumnas y cuando llegué el sábado al colegio, además de tantos carros y exalumnos que celebraban su Día,  vi a uno de ellos que se acercó y me reconoció, a pesar de mis cabellos grises y ya no llevar los bigotes de antes. Pertenecía a la Promoción de 1983. Han transcurrido toda una vida y “este muchacho” recordaba a sus amigos Azabache, Negreiros, Ortiz, Rocha, Seminario y los hermanos Mesía. Algunos de ellos, lejos de la Patria, comunicándose con sus compañeros del colegio en Estados Unidos y apoyándose unos a otros para hacer justicia a las sabias palabras del Padre Isidro cuando decía “Donde hay un Claretiano, hay otro”. Estas palabras se han convertido en un principio de ayuda, amistad, compañerismo para los claretianos que salen de las aulas y se enfrentan a la vida.

Quiero agradecer a Dios por haber permitido que me encuentre con este querido ex alumno de apellido Ledesma, quien con toda humildad y cariño reconoció a su viejo profesor que le exigió como a tantos otros la lectura. Aún recordaba Tungsteno y Paco Yunque, que fueron las primeras lecturas que recordaba y después de estas, vinieron muchas más.

Hubiera podido continuar esta maravillosa conversación, pero había que estar en una mesa y controlar los partidos de los exalumnos. Había traído papel y lápiz para esta realización, pero fue difícil debido a los partidos que tenía que controlar como presidente de mesa. Sin embargo, a medida que avanzaba a la cancha N.º 5, vi a dos grandes Maestros que habían sido invitados al Día de los Exalumnos: El Profesor Gonzalo Fernández y Jorge Tovar. Tuve poco tiempo para conversar con ellos. Avanzaba y los rostros de los exalumnos eran familiares, aunque solo recordaba algunos apellidos. Unos me saludaban y otros no. Unos me reconocían a pesar de los años y sin barba o bigote. Lo importante es que estaban contentos y abrazaban a sus compañeros quienes venían desde muy cerca o tan lejos como los países donde ahora residían. Algunos preguntaban por las Promociones y sus compañeros. Ojalá que al año siguiente haya una pizarra que oriente a estos “jóvenes” que venían a reencontrarse con sus compañeros de aula, de Promoción y que si era posible, les permita jugar siquiera, unos minutos de este partido de fulbito que les hacía recordar un momento de sus vidas como colegiales. Otros estaban presentes para reunirse en un almuerzo con sus amigos de la Promoción.

Brindo con mi amigo y ex alumno Walter Béjar. No pude estar cerca de la cancha de básquetbol por que me enviaron a las canchas de fulbito. A través de él saludo a los jugadores de básquetbol  de las diferentes Promociones que en estos momentos estaban presentes

Los que no jugaban, se refrescaban o estaban en la barra de sus equipos. También tengo que mencionar a un grupo de chicas de las Últimas promociones porque nuestro colegio es mixto desde hace varios años. Siempre tan cariñosas como sus compañeros y compañeras de la Promoción 2009 para quienes escribí A mí me llaman Zeus.

Uno de los exalumnos que se acercaban a la mesa me decían que si me acordaba de ellos. Su rostro en mi memoria y los apellidos, también, pero después de varios minutos como es el caso de Quiñe, el arquero de la Selección de fútbol y de Rey Quispe y su hermano a quien no vi,  por quien guardo un inmenso cariño, por la gran ayuda que me brindaron sus padres en un momento importante de mi vida.

Entre los profesores estaba Benjamín Rebolledo, Jorge Gómez, Emilio Acuña, César Náquira, Pepe Novoa, Luis Alberto Sánchez, Mario Miranda, Carlos Ramírez y otros más que en este momento no recuerdo. Tengo que reconocer el trabajo de los profesores de Educación Física y técnicos que desempeñaron muy bien este sábado, en especial, Carlos Ramírez.

Un saludo especial a la Promoción de García Festini a quienes no encontré en este Día tan especial como es el Día del ex alumno claretiano.

¡Qué Dios los bendiga a todos!

Eddy Gamarra

Profesor

BOCADITOS EN PH…

Esperamos que el Hijito de la profesora Nancy esté mejor. Un saludo fraterno y solidario para la familia.

Igualmente le deseamos mejoría a Dorita.

Nuestra queridísima amiga Katherine está de viaje cumpliendo una función deportiva a nivel internacional. Muchas felicidades.

Se clausuró las Olimpíadas Claretianas. El Maestro de ceremonias fue el profesor Joel Pérez. La entrega de diplomas y medallas fue rápida. Colaboraron los profesores y técnicos deportivos. Todo bien. Un saludo a los campeones de Primer año (1D) y a los campeones de Tercer año (3D) de Secundaria. Se lo merecen.

Las madres de familia de Primer año “D” , realizaron un compartir en el ambiente de las canchas de vóleibol. Los alumnos y alumnas del Campeón Olímpico de Primer año de Secundaria disfrutaron del reconocimiento que hicieron a través del Comité de Aula. Muchos saludos para las mamás de 1D.

La Fiesta continúa. El Festival de Danzas será en esta semana y lo más importante para mí, es que van a bailar mis alumnos y alumnas de Primer año y Tercer año. Les auguro una excelente actuación.

También tendremos Musiclaret. Nuestros músicos se están preparando y sé que lo van a hacer muy bien.

Quedan invitados a la Clausura de los Juegos Florales Claretianos. Será el día 07 de noviembre.

El viernes se realizó La Fiesta de Gala de nuestra Institución. El primero en llegar fue Benjamín Rebolledo, uno de los anfitriones. También estuvieron presentes Nuestra Administradora, Señora Marina y nuestro Subdirector de Secundaria, Pepe Novoa.

El Equipo de Servicios fueron muy puntuales y estaban elegantes todos ellos y ellas.

Así como estaban sentados en una mesa como un grupo compacto, también vimos al equipo de Educación Física en su mayoría en una mesa.

Las profesoras y profesores de Primaria y  Secundaria estuvieron en diversas mesas.

La comida estaba agradable, en especial, los bocadillos chinos. El vino se llamaba Benjamín como uno de nuestros anfitriones.

El Padre Ronel y el Padre Daniel saludaron al personal del Colegio en sus mesas. Estaban la mayoría de los Directivos y Coordinadores.

Nadie se preocupó por la comida, porque no hubo pollo, ni vino el “pollo”.

Mechita, otra de las anfitrionas se repartía de mesa en mesa para preparar a la gente en “la hora loca”.

Nuestro amigo Pablito Rodríguez “El chinito”, fue saludado por sus 25 años. Él, muy emocionado dio un discurso emotivo y fue aplaudido por la concurrencia.

Por cierto, a la hora que empezó la jarana, inauguró el baile, como siempre lo hace. De igual manera, Motta, salió a bailar con su paso acompasado.

La pareja que baila de todo: Roberto y Kelly C. disfrutaron de la fiesta a toda altura.

Un saludo especial para Leidy, Yovanita, que estaba muy calladita, Sofía Ramírez, Raquel y la mayoría de las profesoras de Inglés, quienes olvidándose del pollito con mayonesa, dieron rienda suelta a sus habilidades gastronómicas y degustaron los ricos bocadillos y platos chinos que les ofreció el Chifa en nuestras fiestas.

Los profesores y profesoras bailaron “La hora loca”  con sus sombreritos, globos, corbatas antifaces, silbatos y muchas cosas más.

Hasta pronto

Don Lucas