Yo tengo mi avioncito que lo
construí en la jornada de Pastoral gracias a mi ingeniera de vuelos: Katherine.
Priscila me envió no un avión, sino un
barco. Fue muy sincera en decirme que ella no era constructora de barcos como
lo fue Argos el que llevó a Jasón y a los héroes más destacados de la
antigüedad clásica griega. Sin embargo, lo que había en aquel barquito, era tan valioso que en ese momento no lo
pudiera cambiar por todo el oro del mundo. Alguna vez, Pablo Neruda le escribía
a sus lectores sobre el valor inconmensurable de las palabras, y cuando leí las
palabras de mi alumna por el Día de mi cumpleaños, decidí resolver las
preguntas que ella me hiciera sobre qué libros podría leer. No es tan fácil
recomendar lecturas a una adolescente que ya escribe y lo hace muy bien. Don
Luis Alberto Sánchez, crítico, historiador de la literatura y político peruano
contaba en uno de sus libros que cuando el profesor le exigió a sus compañeros
y a él, leer El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha, no le gustó.
Cuando lo leyó “por su cuenta!, afirmó
que el libro era fascinante. Por lo menos, nunca le recomendaría Cioran.
Falta mucho camino que recorrer.
Ella tenía que darle vida al
barquito de papel, así que le propuse
invitar a sus amigas y compañeras a un crucero fantástico donde podamos visitar
a Peter Pan y su lucha constante con el Capitán Garfio. Sería la segunda vez
que vea de cerca a Peter pan y a la Hada Campanita. La primera vez que los vi
fue cuando yo era un niño, que buscaba a
mis héroes a través de la ventana. Hoy que Priscila me regaló un barco, tengo
que compartir con las personas que quiero. Ninguna innombrable podría ser parte
de la tripulación que bautizaríamos como “La 74”. Es un número mágico. Porque
me ha dado la oportunidad de ser feliz otra vez.
Esta vez navegaremos con “La 74”
para subir a la cubierta del Huáscar y saludar a nuestro Gran marino
peruano
Don Miguel Grau y a todos los navegantes de su entorno que nosotros recordamos
con mucho cariño. El presente, pasado y el futuro son parte del tiempo que la
máquina de H.G.Wells nos permite realizar. El barco de Priscila tiene también
esas características y nosotros las vamos a aprovechar al 100%.
barril de manzanas se escondió Bill y lograr ver de cerca a John
Silver “El largo” y participar de la aventura en busca del tesoro del Capitán
Flint. Después de esa larga jornada nos encaminaremos para visitar a Robinson
Crusoe y a su compañero, Viernes. Sería
un buen momento para hacerle una entrevista de la calidad de Oriana Fallaci y
presentarla en el momento que termine el largo paseo. De repente para finales
del año escolar.
Inevitablemente surcaremos algún
río para conocer a Lord Jim y su enigmática vida. Sé que aprenderemos mucho de
él. Agradeceremos a Joseph Conrad para que nos permita conocer otros capitanes
como aquel de El corazón en las tinieblas y sus piratas, siempre con ese
misterio maravilloso que encontramos en las novelas de Conrad.
Todavía tenemos tiempo de visitar
al Capitán Ahab y el joven Ismael, y ver
la manera más eficaz de dialogar con el capitán y que nos cuente sobre sus
proyectos interminables de acabar con Moby Dick, su eterno enemigo. No va a ser
fácil dialogar con él. Si supiera Herman Melville que apenas se vendieron
diecisiete libros de esta maravillosa obra. Menos mal que contaba con la buena
amistad del autor de La carta escarlata,
Nathaniel Hawthorne y no se sentía solo. Por tanto bien valdría la pena
entrar al mundo de Billy Budd.
Aprovecharemos sobre esta amistad
y le pediremos que nos presente a los personajes de Benito cereno y sabremos
que la vida de un navegante es fantástica y que sus viajes continuos le regalan
el silencio como parte de su carácter.
No todo es color de rosa en el mundo
del mar. Veremos como la maldad y las ambiciones personales ocasionan muertes
en los barcos que surcan los mares como Los pilares de la tierra y el Juego de
tronos donde el que gana, vive y el que pierde, muere.
Gracias Priscila por acordarte de
tu profesor en su cumpleaños. El barco
que me regalaste es mejor que el de Aristóteles Onassis y los de Stavros
Niarchos, porque tiene un rasgo común que los otros no tienen: Es mágico y …¡ Listos
para zarpar con los chicos y chicas de la Promoción 74!
Eddy Gamarra, profesor